Muy de Jaén, del Real o de Nuestro Padre Jesús
El color de los autobuses urbanos marca el primer día de ALSA como nueva concesionaria después de más de 60 años con Castillo
Ha cogido el autobús en el Bulevar. Es usuaria habitual y hoy reconoce que había más gente de lo normal. Le preguntamos si es por la novedad de ver los autobuses nuevos, pero no:
—Se han descontrolado un poco con el horario. Normal en el primer día. Yo me he despistado porque no le he visto los colores habituales.
Marta Sánchez Sotomayor es una de las numerosas jiennenses que hoy ha estrenado los autobuses blancos y morados de ALSA. Jaén vive este viernes un momento de cambio histórico al realizar un cambio de empresa concesionaria. Después de sesenta años, los autobuses amarillos de Castillo han dejado de circular para pasar a ser del color del Real Jaén o de Nuestro Padre Jesús, depende de a quien se le pregunte.
Del mismo autobús se ha bajado María Belén, que aplaude la decisión tomada por el Ayuntamiento.
—Estoy muy contenta. Ha llegado puntual y me alegro que se haya hecho el cambio. Los colores me gustan mucho, me recuerdan a Nuestro Padre Jesús, muy de Jaén.
La operadora comienza con una flota de 32 autobuses de gran tamaño y microbuses, nueve de ellos híbridos. Mantiene las líneas y horarios y dará progresivamente pasos para mejorar la información al ciudadano, con nuevas líneas a Ifeja, mejora de comunicación con la Universidad de Jaén, las zonas comerciales y el centro, los barrios y servicios como el de acceso al Castillo o un bus-búho.
Rafael Viedma es trabajador de ALSA y reconoce que hay más de una persona que se ha quedado "alucinada" por el cambio "radical". Explica, mientras aguarda su turno en la parada de la Plaza de la Libertad, que en este primer día toca adaptarse al nuevo panel de conducción, a las novedades y a las preguntas que realizan los viajeros. Por eso, pide paciencia, tal y como ha estado haciendo la flamante compañía en las últimas semanas.
Viedma es consciente de que los conductores de autobuses urbanos están siempre en el punto de mira, ya que son los primeros que reciben las críticas cuando algo funciona mal. Hoy es un día un tanto especial, porque es la jornada de estreno y le temen a las horas puntas. "Los autobuses son nuevos, son más bajos de piso en una ciudad con muchos badenes y tenemos que adaptarnos a ellos. Probablemente acumularemos algunas pérdidas de tiempo y la gente debería entenderlo hasta que esto vaya evolucionando para bien. Poco a poco iremos mejorando", asevera.
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