Las crónicas sobre esclavitud de Diego Cobo

El periodista santanderino presenta el libro Huellas negras en Alcalá dos años después de ganar la Beca Michael Jacobs de Crónica Viajera

Huellas negras, el rastro de la esclavitud, compilación de crónicas escritas por el periodista Diego Cobo, vio la luz ayer en la biblioteca de Alcalá, con el autor rodeado de colegas y vecinos del municipio. El periodista cerró así una etapa después de convertirse, hace dos años, en el tercer ganador de la Beca Michael Jacobs de Crónica Viajera, promovida por el Hay Festival y la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano. El libro está disponible en el siguiente enlace.

El periodista Santiago Campos y el autor Manuel Molina Glez analizaron no solo las claves del libro, sino que también recordaron la llegada de Cobo a la Sierra Sur tras ganar la mencionada beca. "Diego sigue el rastro de algo vergonzoso para la historia de la humanidad. Parece que todo se olvida, pero está ahí", dijo Molina Glez.

Los presentadores valoraron la apuesta de Cobo por un tipo de periodismo que huye de la lectura rápida y que precisa de tiempo antes de producir los textos, centrados en países tan diferentes como Jamaica, Estados Unidos, Gambia, Cuba y Colombia. "El mérito de reporteros como Diego Cobo es filtrar la historia por el lado humano", valoró Molina Glez.

El autor recordó que todo empezó a raíz de una noticia sobre Jamaica que lo llevó a investigar. "Tras hablar con esclavos, profesores y académicos advertí un hilo conductor. Después fui a Gambia y a Estados Unidos, y concebí el proyecto como una trilogía", explicó.

Cobo abordó el debate que despierta descubrir todo lo que rodea al comercio de esclavos y a las diferentes formas actuales de esclavitud, como son los trabajos precarios. "Quiero creer que lo que escribo es incómodo", dijo y definió a la realidad como "un continuo proceso". "Los reportajes me han servido para aprender, y los cimientos del libro son la libertad bien concebida", apuntó.

EL VÍNCULO CON FRAILES

Diego Cobo fue protagonista en la tercera edición de la Beca de Michael Jacobs, y desde entonces se ha convertido en un visitante usual del sur de Jaén, en concreto de Frailes, donde justo ahora ha pasado una temporada. Buena parte de la culpa de su regreso la tiene la amistad que ha labrado con Santiago Campos. El reportero jiennense reconoce que tuvo "conexión" con el autor de Huellas Negras desde el principio.

Cobo ha prologado un libro de Campos, y en el texto ha remarcado la magia de Frailes desde que el hispanista Michael Jacobs se afincó y luego narró las historias de los lugareños que más le llamaron la atención. Los cronistas tienen una cita con el pueblo de la Sierra Sur cada verano, en el marco de las Jornadas Literarias Internacionales.