CRIPTOMONEDAS, EL MERCADO DEL DINERO VIRTUAL

Llegaron para quedarse. No es solo Bitcoin; hay miles más y configuran un mercado espontáneo muy volátil y similar al de La Bolsa. Las criptomonedas, monedas virtuales ajenas al control de los Gobiernos y de los bancos centrales, son presente y también futuro de la economía. Porque hoy los actores de este mercado libre solo representan el 5 por ciento de población mundial. No obstante, el número de inversores aumentará con el tiempo, señalan los consultados por este diario. Entrevistamos a jiennenses que ya están familiarizados con las vicisitudes del dinero virtual. Subrayan las principales reglas: intervienen personas y hay operaciones matemáticas. También hay, cómo no, riesgo.

"INVERTÍ UNA CANTIDAD QUE ESTABA DISPUESTO A PERDER"

¿Se puede ganar dinero en el mercado de las criptomonedas? "Sí, claro que se puede ganar. Y también se puede perder. Como en La Bolsa". Habla Óscar Rivero, programador jiennense afincado en Córdoba. Él ha ganado y ha perdido. Bueno, en realidad, aún ni ha ganado ni ha perdido. Porque su inversión sigue en juego, abierta a crecer o a menguar. No ha 'cerrado' aún, como aluden los inversores —conocidos como traders— al hecho de mantener las criptomonedas sin canjearlas por divisas convencionales. 

Rivero empezó con 1.000 euros y en menos de un año la cuantía aumentó hasta los 13.000. Compró su primer Ethereum —una moneda virtual pensada para construir sobre ella otras criptomonedas— en septiembre del año pasado. Hoy la cifra ha decrecido hasta el equivalente a unos 7.000 euros. "Y no voy a sacar nada, porque creo que va a subir con el tiempo. Hay que tener paciencia", dice. Y es una de las claves del mercado: aguantar, resistir. Un lema común es la palabra hodl, la aproximación intencionadamente troleada al vocablo inglés hold.

El comienzo de todo es abrir una cuenta en una casa de cambio, donde se intercambia y se saca el dinero. Rivero lo hizo en Gdax, la de Coinbase, que es una suerte de PayPal en las criptomonedas. "Yo ya minaba Bitcoin entre finales de 2009 y comienzos de 2010", indica. "Un día, buscaba métodos de pago para una tienda online y acabé en Coinbase. Así me compré el primer Ethereum", recupera el programador jiennense.

Activa la cuenta, tomó la primera decisión: ¿cuánto dinero merece la pena arriesgar? "Tanto como estés dispuesto a perder sin que te importe", señala Rivero, y es un consejo a principiantes y a inversores dubitativos. 

LA INFORMACIÓN, CLAVE PARA TOMAR DECISIONES

La comparación con La Bolsa tiene sentido porque el valor de las criptomonedas varía constantemente, sube y baja. Y la regla más importante para interpretar esa volatilidad y no perder dinero es estar informado. Muy conocida en el ámbito es la aplicación y sitio web Reddit, un foro en el que desembocan todas las noticias relacionadas con el dinero virtual. La mayoría de las publicaciones están en inglés, y la interacción entre usuarios es un indicador de los movimientos, aun cuando también se cuelan rumores. Twitter y Telegram son otros canales muy empleados para estar al tanto. "Necesitas informarte para saber por qué decides invertir dinero en una moneda y no en otra", expresa. En Telegram hay grupos temáticos de casi todas.

Existen páginas webs en las que se aprecian las variaciones de valores, la capitalización de mercado, el volumen —la cantidad de dinero que hay cada 24 horas entre compras y ventas— y la circulación —el número total de monedas de cada tipo que circulan. Las más comunes son CoinMarketCap y LiveCoinWatch . En ambas aparece la lista de las criptodivisas más cotizadas.

Rivero dedica cada día entre una y dos horas para acercarse a los datos de las monedas que ha elegido para ganar dinero. "Yo no aspiro a vivir de esto", puntualiza. Quien tenga mayores pretensiones dedicará, por lógica, más tiempo a consumir datos.

LOS TIPOS DE MONEDAS

La variedad de criptomonedas tiene algo de mundo fantástico, de universo Pokèmon. Hay miles, cada cual con un nombre y cada cual está vinculada a materias concretas.

Las más conocidas y más atractivas son Bitcoin y Bitcoin Cash. La más operativa en la actualidad para efectuar el cambio a divisa convencional —euro, dólar y libra, entre otras— es la mencionada Ethereum. 

Pero hay más:

IOTA, que es, en palabras del programador, "para el internet de las cosas". "Puede servir en un futuro para que que los propios coches paguen entre ellos por conocer cómo esta el tráfico", ejemplifica. 

SunContract, que está vinculada con la energía.

Steem, que es empleada por lectores para pagar a autores que producen contenido que les interesa —y ahora interesan las criptodivisas.

FunFair, que es del agrado de los jugadores de póker.

Ripple, que es utilizada por bancos como el Santander y el BBVA para agilizar las transacciones financieras globales. Rivero señala que es una de las más detestadas por los inversores que no están vinculados a la banca. "Es quizá la más parecida a las divisas convencionales, porque se aleja de la naturaleza descentralizada de las criptodivisas", opina.

UN TRADER DE LA CAROLINA EN MALTA, "EL PAÍS DE LAS CRIPTOMONEDAS"

Juan José Lozano tiene 27 años, nació en La Carolina y vive en Malta. "El país de las criptomonedas", dice. Ocurre que a diferencia de otros gobiernos que ven con recelo las opciones de poder independiente que ofrece el dinero virtual a los ciudadanos, en Malta la mentalidad es receptiva, pro criptodivisas. "Vienen muchas empresas aquí dedicadas al ámbito", asegura en declaraciones a Lacontradejaén.

Parte de la actividad comercial de Lozano entronca de lleno con el universo de las monedas no sometidas a ningún tipo de regulación. "Hablamos de un mercado alegal, de transacciones anónimas que no dejan rastro. Eso es lo más atractivo", afirma.

Lozano compró por primera vez ripples en agosto del año pasado. Se abrió la cuenta en la casa de cambio Kraken. Vivió su particular momento de auge, pues alcanzó meses después los 9.000 euros con una inversión marginal. Adivinen qué hizo cuando llegó a esa cantidad. No, no 'cerró'. "'Buy and hold', compra y sostiene", indica en alusión al lema común. También ha invertido y operado con otras aparte de Ripple, como Bitcoin.

ACUMULAR RENTA O SUFRIR ESTAFAS

En pueblos de Jaén el mercado de las criptomonedas atrae a los jóvenes y cada vez le resulta más familiar. ¿Esta forma de ganar dinero puede ser un bálsamo para la juventud desempleada? "No creo que esto saque a nadie del paro, aunque es cierto que cada vez habrá más 'traders'. Todavía hay poca gente dentro, pero cuando haya más, reinará la oferta y la demanda. No conozco a muchos de Jaén, la verdad", expresa Lozano.

Hay potenciales inversores que no se atreven. No acceden al mercado por el miedo a las estafas. Existen. Hay monedas que de pronto suben y suben de valor y luego este se desploma con las consecuencias lógicas para sus inversores. Son sospechosas. "Por eso es tan importante estar informado", tercia Rivero. "Hay que observar la capitalización y el volumen de cada moneda", remarca el carolinense.

"Debido al auge y aumento exponencial en el precio que están teniendo las criptomonedas en el mercado, los ciberdelincuentes han puesto su foco en ellas", aseguran desde el Departamento de Delitos Telemáticos de la UCO de la Guardia Civil.

"Los movimientos de pensiones tienen más riesgo", opina Lozano. Y añade: "A cualquiera le da más tranquilidad que el dinero esté descentralizado, en propiedad de mucha gente, que se concentre en un banco central".

EL ATRACTIVO TECNOLÓGICO

El perfil del inversor en criptodivisas es el de un profesional ligado a los campos de las nuevas tecnologías y la economía. Como el caso del jiennense Óscar Rivero. ¿Solo le mueve acumular la renta? "Bueno, claro que quiero ganar, pero me atrae mucho la tecnología que asoma. El internet del futuro, descentralizado, se está construyendo con criptodivisas. Es una tecnología súper novedosa", resuelve.

¿Intentarán los políticos controlar un mercado cuyo valor ronda actual los trescientos mil millones de dólares? "Sí, pero tarde o temprano entenderán que no se pueden poner puertas al campo", interpreta José Antonio Peña, profesor universitario ligado a Campillo de Arenas y coordinador andaluz del Partido Libertario. Está por ver qué hacen los gobiernos. De momento, los jiennenses que invierten coinciden: "Hemos venido a jugar".