Las ventas de aceite de oliva sufren un ligero retroceso

El mes de noviembre cierra con un 15% menos de stock con respecto a 2023 debido a los buenos datos de comercialización pese a la ligera caída

Ligero, pero normal, retroceso en las ventas de aceite de oliva. Según los datos hechos públicos por la Agencia de Información y Control Alimentario, en el mes de noviembre se enajenaron 73.298 toneladas de oro líquido, sin contar las importaciones. El mes pasado fueron 100.000 toneladas.

Un descenso con respecto a las de octubre que organizaciones agrarias como Asaja Jaén ven normales. Su gerente, Luis Carlos Valero, lo explica: "Todavía se está dando salida a los aceites que se compraron verdes y frescos a un precio bastante mayor". Está tan confiado que apunta a que se verá una recuperación poco a poco. 

Con respecto a la producción, la acumulada en estos dos primeros meses de campaña asciende a 292.019 toneladas, tras un mes de noviembre en el que se han recogido 255.742. En el caso de la provincia de Jaén, el aceite producido es de 66.295. En estos momentos, la cosecha es un 9,7% superior a la campaña pasada.

Con estas cifras, las existencias finales son de 321.147 toneladas de aceite de oliva, de las que 98.550,02 están en envasadoras; 227.749,98 en almazaras y 847,83 en el Patrimonio Comunal Olivarero. "Las disponibilidades ya empiezan a ser suficientes, lo normal al inicio de la campaña. Habrá que esperar al próximo mes por si hay alguna corrección en lo aforado, ya que tendremos más de un 10% de los depósitos medidos, con lo que ya empezará a ser más exacto”, ha explicado el gerente y portavoz de Asaja-Jaén, Luis Carlos Valero.

De esta manera, hay menos aceite de oliva que el año pasado. El mes de noviembre cierra con un 15% menos de reservas con respecto a 2023. Si entonces había 378.900 toneladas, a día de hoy son con 321.147; es decir, 57.753 toneladas menos, gracias a los buenos datos de comercialización.

Las 95.000 toneladas vendidas en noviembre, incluidas las importaciones, lanzan dos claros mensajes al sector olivarero, según confirma el responsable de la sectorial de Olivar y Aceite de UPA y secretario general de UPA Andalucía, Cristóbal Cano: la fidelización de los consumidores a la grasa vegetal más sana y saludable del mundo y que no se dan las condiciones para que el precio en origen siga bajando.

Para UPA Andalucía, la situación del mercado es "absolutamente incomprensible". "El sector no ha aprendido nada de lo que los mercados nos han demostrado en estos dos últimos años, en el que se ha comercializado con valor, a precios a los que la demanda mundial del consumo no se ha visto resentida", lamenta. Y el problema de todo esto es que no se sabe cuál será el suelo, ni hasta dónde llegará la tendencia bajista.

"El sector cooperativo está contribuyendo decididamente a esta espiral suicida regalando el aceite, porque ya nos constan operaciones por debajo de los costes de producción", avisa.