'Passo' defiende la legalidad de las elecciones: "Quieren enturbiar nuestro trabajo"
Mario Liébanas Johnson, que anunció su deseo de liderar de nuevo 'Passo', sostiene que el proceso no fue legal y afirma que el colectivo languidece
Francisco Gutiérrez seguirá hasta 2026 como presidente de la asociación de vecinos Passo. Su reelección se dio el pasado 27 de marzo. "Fue un proceso absolutamente legal y amparado por los estatutos", sostiene en declaraciones a este periódico. Mario Liébanas Johnson, expresidente que anunció su deseo de volver a liderar el colectivo, asegura que la cita no cumplió los requisitos mínimos.
Los estatutos de 'Passo' establecen que cualquier candidato debe ser socio y estar al corriente con la asociación como mínimo con 48 horas antes de una cita electoral.
"Si hay opciones de que se repita, pediremos la cautelar y habrá denuncia", asegura Liébanas, quien se siente respaldado por "un grupo numeroso de gente" que también piensa que el proceso no fue escrupuloso.
Nueve personas fueron validadas en una asamblea que sólo tuvo un punto, 'Elección de la junta directiva'. "Si algo tenemos es que somos legales. No es justo cómo nos han tratado en redes", señala Gutiérrez, quien recuerda que cada dos años los socios ratifican a las personas con cargo.
LA VÍA JUDICIAL, EN EL AIRE
Francisco Gutiérrez asegura que desde se notificó el encuentro con un cartel en la sede del colectivo vecinal con dos semanas de antelación. Además, los socios fueron avisados por carta una semana antes.
"Si Liébanas está tan seguro de que fue ilegal, que vaya al Juzgado", dice el representante del polígono de El Valle. Y agrega: "La otra opción, como se le dijo en asamblea, es lograr el apoyo de al menos un tercio de los socios para que haya otra convocatoria extraordinaria".
Mario Liébanas Johnson insiste en que no hubo control. "No se pidió el DNI a los asistentes. No fue serio. Y hay gente muy cabreada. Cuando yo fui presidente se presentaban hasta 26 personas y se eligieron a 12. Esta vez sólo fueron nueve", compara.
Está por ver si la renovación de la junta llega al Juzgado. Ante el mismo hecho, dos relatos muy diferentes, con dos discursos antagónicos. "Algunos de la junta llevan ahí 20 años", critica Liébanas Johnson. "Nosotros no tenemos aspiraciones políticas; trabajamos para el barrio", concluye Gutiérrez.
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