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"Mi sueño es pinchar en Madrid, en la capital de España"

Por Javier Cano - Septiembre 27, 2025
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"Mi sueño es pinchar en Madrid, en la capital de España"
El DJ guardeño. Foto cedida por Jucama.

Jucama DJ (Juan Antonio Carmona Martínez —La Guardia, 2002—) empezó a pinchar "en serio" en 2022, y desde entonces asegura que no habrá tenido más de uno o dos "findes libres". Electricista entre semana, de viernes a domingo convierte al personal en seres eléctricos (como cantaba Miguel Ríos) al ritmo que él les marca, siempre a la última.    

—¿Cómo llegó a las cabinas, a las mesas de mezclas? 

—Llegué a este mundo porque mi padre, cuando tenía mas o menos mi edad, también era DJ, siempre ha estado muy vinculado con el mundo de la música por el tema de los equipos de sonido, y cuando yo era pequeño me regaló mi primera mesa de mezclas. A raíz de ahí ya empecé un poco con las redes sociales, pero no fue hasta 2022 cuando empecé a meterme en el mundillo de las discotecas. Empezaron a verme en más sitios de Jaén y provincia y me fueron llamando de más sitios, hasta el día de hoy.

—¿Para esto hay que estudiar, hay que formarse musicalmente o en el ámbito técnico? 

—Mi formación fue por libre. Mi padre me regaló una controladora, pero yo no podía preguntarle nada, mi padre pinchaba vinilos.

—Dice que desde 2022 no ha parado.

—No he parado, no. Desde el verano de 2022 hasta aquí, habré tenidos dos o tres findes libres. 

—Entonces, ¿lo que empezó como una afición se ha terminado convirtiendo en una profesión?

—No me gusta decir que me dedico profesionalmente a esto, porque aunque se gana dinero y ya estoy dado de alta (para poder facturar) lo compagino con la electricidad: mi padre es electricista y trabajo con él de lunes a viernes por la mañana. Cuando llega el fin de semana, ¡a las discotecas a poner música!

—La pregunta se responde sola, pero se la voy a hacer: ¿qué le tira más, la electricidad o las discotecas? 

—Ahora mismo, con la edad que tengo, me tiran un poquillo más las discotecas, pero sí es cierto que no me veo ahí con treinta o treinta y pico años. Ahora soy joven y es un dinerillo extra, pero no es mi sueldo principal, no es lo que me da de comer. 

—El mundo de los DJ es inseparable de la noche, que dicen que confunde. En general (y en particular, por supuesto), ¿quien pone música puede abstraerse del ambiente, o al final...?

—Hay de todo; cuando se trabaja en la noche hay que tomárselo como eso, como un trabajo; aunque te lo estés pasando bien, no está bien visto por el dueño de la discoteca o por el público que estés todo el rato con un cubata en la mano. Eres un trabajador más, y para tu mismo cuerpo no es saludable: tienes que trasnochar todos los fines de semana y si le añades a eso beber muchísimo... Además las discotecas te dejan de llamar si te ven así; al principio incluso ellas mismas te ofrecen, para ver si caes o no, para probarte en eso. 

—¿Tienen ustedes trabajo todo el año, o el DJ es una criatura casi exclusivamente veraniega?

—Va por picos, por ejemplo el verano es muy bueno, a lo mejor desde el jueves hasta el domingo no paras ninguna noche, incluso algún lunes o martes, con las ferias, las terrazas... En Jaén eso se alarga un poco con la feria de San Lucas, la última de España; luego llega Halloween y hay un parón hasta Nochebuena y Nochevieja.

—Alguien tiene que poner música esas noches, ¡pero son tan de estar con la familia! ¿No le da pereza?

—Cuando yo empecé a pinchar por la noche, decía que nunca pincharía esas noches, que eran para estar en familia, hasta que llega un punto en que te ofrecen mucho dinero y dices: "Ceno con mi familia, me tomo mis uvas y me voy a trabajar, aunque ese día no pueda disfrutarlos tanto, ya habrá tiempo". 

—Hablando de familia... ¡Debe de ser complicado tener pareja para alguien que entre semana para y el finde trabaja, ¿no? 

—Es un poco complicado, sí; en mi caso tengo pareja, que ya me conoció trabajando en esto, pero sí es cierto que si pillamos un fin de semana libre, estamos todo el fin de semana juntos, porque no sabemos cuándo tendremos otro. Ella estudia en la Universidad entre semana y yo trabajo, así que es complicado. 

—Como la mujer de un torero, más o menos.

—Claro. Pero, sobre todo, lo más importante es la confianza. 

—Ay, la noche, la noche. 

—Por eso: estás trabajando en la noche y no hace falta ser muy muy guapo para saber que eres el centro de atención de la discoteca, siempre hay alguien que se te acerca, o casi siempre. A mí, de diez noches a lo mejor se me acerca una muchacha una noche. 

—¿Y de compañerismo cómo van los DJ? ¿O esto es competencia pura y dura?

—En Jaén, en esto, hay dos tipos de personas: los que intentan aprovecharse del resto, es decir, los que están arriba y te dejan claro que tú estás abajo, que no te acerques a ellos. Y otros que sí que tienden una mano para ayudarte, y en este mundo es imposible entrar si alguien no te tiende la mano. 

—Para cuando llega el momento de esa llamada que se espera, ese local en el que se quiere pinchar y, al final, llama, ¿cómo entrenan, cómo se mantienen al día en novedades tecnológicas o preferencias musicales, por ejemplo?

—Antes me tiraba todo el día, todas las tardes, tres o cuatro horas seleccionando música nueva, pero a día de hoy ya tienes casi de todo y aunque todos los meses y todos los días sale música nueva, espero toda la semana y cuando llega el jueves, veo lo que más se ha escuchado en las plataformas y lo preparo. O ensayo algunas mezclas para cuadrarlas para el fin de semana. Un día o dos a la semana hay que echarle. 

—¿Cuál es su máxima aspiración como Dj, Jucama?

—Yo empecé a pinchar de chiquitillo, nunca pensé que podría llegar a ganar nada con esto: cuando empecé mi primer sueño era pinchar en una discoteca, nada más, y lo cumplí. Luego soñé con llegar a pinchar en un festival, y también lo conseguí. Todas las metas que quería las he logrado. Pero me queda una. 

—Cuente, cuente.

—Pinchar en Madrid, en la capital de España. Ahora lo veo casi imposible, como cuando era pequeño y veía imposible pinchar en una discoteca (había que ser superbueno). Y lo mismo con el festival, hasta que lo conseguí. Nunca se sabe, a lo mejor mañana me llaman para pinchar en la capital.

 Foto cedida por Jucama DJ.
Foto cedida por Jucama DJ.

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