La borrasca Claudia deja las lluvias más esperadas del otoño

Campillo de Arenas, Jándula, Quiebrajano y varias zonas de Los Villares superan los 30 litros en solo dos días, en un episodio beneficioso pero algo tardío para la campaña

La borrasca Claudia pone fin a la prolongada sequía del otoño en la provincia de Jaén. Las precipitaciones de los dos últimos días, sumadas a las que se registrarán este fin de semana, dejan acumulados significativos, hasta el punto de que es el episodio más generoso de lo que va de temporada del recién estrenado año hidrológico.

Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, estaciones como Campillo de Arenas han superado los 50 litros en apenas dos días, mientras que en Jándula, Quiebrajano, Encinarejo y diversas zonas de Los Villares se han registrado entre 25 y 40 litros. También en la Sierra de Cazorla las lluvias han sido importantes, con más de 30 litros recogidos en la jornada del día 14.

Estas precipitaciones llegan en un momento importante para el olivar, a las puertas de la recogida masiva y al final del proceso de maduración. Sirven, en gran parte, para aiviar el estrés hídrico de los árboles con vistas a la siguiente campaña. 

En el ámbito hidrológico, la llegada de Claudia también supone un alivio para los embalses de la cuenca del Guadalquivir a su paso por Jaén, que amanecen con 724 hectómetros cúbicos almacenados, lo que equivale al 30,66% de su capacidad total. Una cifra que refleja la situación aún delicada del sistema pese al aporte de las últimas lluvias. Embalses clave como El Tranco se mantienen en torno al 22% de llenado, Guadalén apenas supera el 21%, Giribaile ronda el 25% y Siles se sitúa en un 33%.

Otros, como La Fernandina, están en torno al 31%, mientras que Rumblar destaca con más de un 60%, situándose como uno de los más recuperados de la provincia. El conjunto evidencia un escenario dispar, con importantes diferencias entre sistemas, pero todos ellos necesitados de episodios más continuados para una recuperación sólida.