SALVAR AL CINEMA ESPAÑA DE FRAILES
María Teresa Murcia, propietaria del Cinema España de Frailes, espera que las administraciones ayuden en el rescate del emblemático cine en ruinas, un espacio cultural único que abrió en 1949
El Cinema España de Frailes abrió las puertas el 13 de junio de 1949 con la película Camino de Santa Fe, cerró a finales de la década de los años 70 y desde entonces sólo ha albergado actos culturales esporádicos, ninguno tan mediático como el reestreno en 2001 de El último cuplé, con la protagonista Sara Montiel entre el público. Pasa el tiempo y la operación para salvar a una joya única en la provincia —quizá en España— se complica. María Teresa Murcia, cronista de la villa y propietaria del espacio, está dispuesta a asumir la reforma siempre y cuando las administraciones garanticen un alquiler a largo plazo. El Ayuntamiento de Frailes y la Diputación de Jaén conocen las potencialidades del Cinema España, pero no moverán ficha hasta que la restauración sea una realidad. El coste de la reparación tampoco está cuantificado.
—Yo quiero que se conserve, que se quede para Frailes y que sea además de un cine un salón polivalente para uso de los fraileros —explica Murcia a este periódico sentada en el palco, desde donde se visualiza la mayor parte de las instalaciones: enfrente está el gallinero sostenido ahora por palés; abajo, las butacas y el escenario.
Es lunes 6 de septiembre de 2021, y ella ha vuelto a abrir las puertas del Cinema España a la prensa, esta vez a Lacontradejaén. Ya tiene algo de ritual y es una secuencia que va y viene: la propietaria comparte ante una cámara el viaje en el tiempo, que es tanto patrimonio histórico del pueblo como memoria sentimental de ella.
Murcia reconoce que en el Ayuntamiento hay predisposición para evitar que el cine desaparezca. Antes de las elecciones municipales de 2019, con José Manuel Garrido todavía al frente de la Alcaldía de Frailes, el Ayuntamiento envió el último informe a la Diputación para detallar el estado del Cinema España. La propia María Teresa Murcia, asesora del equipo de Gobierno en asuntos de turismo y cultura, redactó el texto.
—Incluso alguna vez lo he leído en el boletín de la Diputación, pero parece que duerme el sueño de los justos —dice.
El último movimiento del Ayuntamiento para desencallar la situación no ha sido el único. Antes, en la década de los años noventa, Vicente Serrano, entonces concejal de Cultura de Frailes, también quiso recuperar el espacio.
—Se entusiasmó con la idea y mandamos un informe a la Diputación de Jaén, pero tampoco hubo respuesta —dice Murcia y alaba la implicación de Serrano.
El camino de las administraciones fue señalado por el ya fallecido Fermín Murcia, tío de María Teresa, trabajador clave para entender el éxito del Cinema España desde su inauguración hasta que expiró a finales de la década de los años 70. En el verano de 2013, Fermín Murcia admitió a este reportero que tenía depositadas sus esperanzas en la Junta de Andalucía para lograr una suerte de concesión durante décadas.
Hoy su sobrina y heredera del Cinema España entiende que la fórmula puede ser viable e incluso ve con buenos ojos que termine siendo propiedad del Ayuntamiento en el futuro.
—Es lo que yo quiero ahora y lo que quería mi tío Fermín —sostiene.
"TENEMOS INTERÉS Y NO ES IMPOSIBLE RECUPERARLO"
Encarnación Castro, alcaldesa de Frailes, explica por teléfono a este medio que rescatar al cine no es imposible. "Tenemos interés, pero está claro que las administraciones no podemos ejecutar una obra en un edificio privado", subraya. "Y si en el futuro hubiese una concesión, intuyo que el canon no sería muy alto", añade.
En caso de que la propiedad decida asumir la reparación, Castro ve viable un convenio con la administraciones. "Una vez se ejecute la obra, la dueña puede mantener la titularidad del bien y nosotros encontrar un gestor para dinamizar el espacio", concede. Es decir, incluso el lugar podría dar al menos un puesto de trabajo en el pueblo en caso de ser recuperado.
La alcaldesa remarca que hay interés en la ciudadanía por las potencialidades del Cinema España, perfecto para presentaciones de libros, congresos, obras teatrales, música en directo, recitales de poesía, exposiciones y prácticamente cualquier tipo de expresión cultural. Sería también un atractivo turístico más. Antes hay que evitar el deterioro: las paredes que una vez fueron rojas pierden el tono; el gallinero necesita una reforma ambiciosa, y donde antaño reinaba la pantalla ahora hay una gotera. Son sólo parte de los desperfectos. El tejado sí fue reforzado gracias a la intervención de Fermín Murcia.
"QUIERO PONER MI EXPERIENCIA AL SERVICIO DEL CINE"
¿Y la iniciativa privada? ¿Hay alguien interesado en comprar el cine? María Teresa Murcia admite que la única persona que se interesó por el espacio quería convertirlo en un supermercado. La propietaria declinó. Asegura que lo sentimental pudo con lo económico. También cuenta que alguna vez ha pensado en una campaña de mecenazgo vía internet, pero de momento no se ha animado a impulsarla. Si se diese, tendría que definir cuáles serían las recompensas de los mecenas.
El Cinema España seduce a la población extranjera afincada en Frailes. Es el caso del artista Nigel Greene, vecino de la villa desde 2004. Sueña con que el espacio sea de nuevo una referencia cultural del municipio. "Me gustaría ver el cine restaurado en lugar de remodelado y me encantaría poner mis 50 años de experiencia tanto en la realización de eventos culturales como en la restauración de edificios históricos al uso de Frailes. Estoy seguro que atraerá gente de cerca y de lejos", expresa el pintor británico en declaraciones a este periódico.
Nigel Greene impulsó en el verano de 2013 la primera y hasta la fecha única edición del Festival de Arte y Cultura de Frailes. El Cinema España fue parte de las localizaciones de una agenda que llenó de música las plazas del pueblo. En aquel verano, el encantamiento de Greene con el cine aumentó y por más que siga cerrado todavía confía en la reapertura definitiva: "Es una joya de época".
También tomó parte en el festival Keira Greene, hija de Nigel y artista multidisciplinar. "Fue muy especial conocer a Fermín Murcia y aprender cómo de importante fue la historia del Cinema España para él. Era una persona muy entusiasta y tenía mucha energía", recuerda en conversación con este diario. Keira Greene realza "la identidad" del cine frailero en comparación con otros que conoce de Londres. "La atmósfera es única. Me encantaría trabajar de nuevo en el Cinema España", manifiesta.
CUANDO EL HUMO TAPABA LA PANTALLLA
El cine agitó la vida lúdica del pueblo en las décadas en las que estuvo abierto con su oferta de fin de semana. Antes, fue un cine de verano. Las películas llegaban hechas rollos desde Sevilla y a partir de ahí había que montarlas. El proyector sigue en el lugar de siempre. Cuenta la cronista de Frailes que un periodista estalló en llanto al contemplarlo.
En el cine trabajaban tres hermanos: Carmela Murcia, en la taquilla; Fermín Murcia, en el proyector con la ayuda del cocinero emérito Miguel Montes, y Antonio Murcia, en el ambigú, donde servía pipas, cervezas y anís, entre otros productos de consumo rápido. Sentarse en la butaca costaba cinco pesetas; tres en las silla, y dos en el anfiteatro y en el gallinero. María Teresa Murcia recuerda que a veces el humo de los cigarrillos de los asistentes llegaba a tapar la pantalla.
Al Cinema España llegaron estrellas de la época, desde el grupo Los Paquiros hasta la familia de Ángel Cristo, que ofreció un espectáculo de trapecio. El destape también tuvo sus días de gloria.
Algunos de los actos más recientes en el cine, todos anteriores a la pandemia, han sido la presentación del libro Zona de sombra, de María Teresa Murcia y Ana Mercedes Cano; el homenaje a Miguel Montes y la grabación este mismo verano de un cortometraje que aún no ha visto la luz.
El fundido en negro continúa. Siguen donde siempre estuvieron los carteles de las películas que entonces cautivaban a la audiencia, con rostros como los de Antonio Molina y Errol Flynn. El cine de Frailes todavía es un sueño. Aún se puede evitar que acabe reducido a escombros.
—Mientras hay vida, hay esperanza —concluye la dueña.
Fotos y vídeo: Andrés García y Fran Cano.
Únete a nuestro boletín