Cerrar Buscador

Miguel López Rivera: del Santo Reino a Yale y de ahí, a Harvard

Por Javier Cano - Junio 29, 2024
Compartir en X @JavierC91311858
Miguel López Rivera: del Santo Reino a Yale y de ahí, a Harvard
Miguel López Rivera hace patria en tierras estadounidenses. Foto cedida por María Isabel Gómez Rivera.

Recién graduado en la prestigiosa Universidad dieciochesca y en capilla para la decana de Norteamérica, Úbeda, Bélmez y Cabra son sus paisajes sentimentales

"Enhorabuena!!! Y muchísimas gracias por llevar nuestras banderas sintiéndose orgulloso de sus raíces!!!!" o "Enhorabuena es para nosotros los andaluces tener un paisano con tanta inteligencia un saludo". 

Son solo dos de los muchos mensajes recibidos a través de las redes sociales por Miguel López Rivera (Móstoles, Madrid, 2001) a cuenta de su brillante trayectoria académica, tan apabullante como halagüeña.

y es que este joven residente en Úbeda, por cuyas venas corren las sangres belmoralenses y cabrileñas de sus abuelos maternos y paternos, ha puesto el listón muy alto para los estudiantes de la provincia. Tan elevado, que ya cuelga de su cuarto el título que lo acredita como graduado en Biología Molecular por la prestigiosa Universidad de Yale, en Estados Unidos. 

El mismo país donde, el próximo mes de agosto, comenzará su doctorado, esta vez en otra institución académica de esas que quitan el hipo: Harvard:

"La ciencia me ha gustado siempre mucho, estaba entre la Biología Molecular y la Astrofísica, pero la primera me parecía en todo superrelevante y cambiante, descubriendo siempre cosas que no esperas", comenta López Rivera a Lacontradejaén desde su casa de Úbeda, donde pasa la época estival hasta su incorporación a las aulas norteamericanas. 

No es nuevo para él eso de oír otros idiomas, de apoyar los codos fuera, si se atiende a que el instituto lo cursó en Holanda: "Solicité una beca para estudiar allí el Bachillerato Internacional, en colegios del Mundo Unido, y ahí encontré las becas para ir a Estados Unidos", aclara.  

Siempre a muchos kilómetros, sí, pero con el corazón en Jaén, que si vio la luz primera en tierras madrileñas no es menos cierto su arraigo con el mar de olivos:

"Me he criado en Úbeda, a Bélmez y a Cabra voy cada dos por tres, mi padre tiene olivas cerca de Bélmez y estoy siempre por ahí", explica este hijo único de maestra del colegio La Milagrosa de la ciudad renacentista y de olivarero. Un trabajo, el del campo, que el propio protagonista de este reportaje conoce de primera mano: "Sé lo que es trabajar en las olivas, de pequeño sí lo hacía, y me sigue gustando; en las vacaciones voy a dar vueltas por allí". 

Lo mismito que tiene pensado hacer en cuanto reciba el birrete de doctor y, con ese currículo académico suyo, se le abran todas las puertas profesionales: "En el futuro me gustaría trabajar en España, pero no sé hasta qué punto las ciencias tienen aquí los fondos de los que disponen en Estados Unidos". 

Con estos mimbres, y pese a ser consciente de esa realidad, lo tiene claro: "Si no en España, al menos sí en Europa", sentencia.

 Con sus padres, rebosantes de orgullo. Foto cedida por María Isabel Gómez Rivera.
Con sus padres, rebosantes de orgullo. Foto cedida por María Isabel Gómez Rivera.

He visto un error

Únete a nuestro boletín

COMENTARIOS


COMENTA CON FACEBOOK