'The Rider' y el ocaso abrupto de un montador de caballos

La película dirigida y escrita por Chloé Zhao convence con una historia íntima y de luz de una estrella del rodeo

The Rider (Chloé Zhao, 2017) cuenta la historia de Brady, una estrella del rodeo y entrenador de caballos que ha sufrido un grave accidente y no sabe si volverá a montar, a ser parte de un espectáculo que adora. La imagen del comienzo del filme, con la cabeza del protagonista llena de grapas, apunta al conflicto principal, pero hay otros colindantes: la familia pasa por apuros y las adicciones del padre y la dependencia de la hermana también condicionan la decisión de Brady.

El trato a todos los personajes está tan cuidado como la atmósfera, que retrata la vida actual en el oeste americano. Todos los planos están al servicio de un western intimista y moderno, donde la verdadera acción está en la cabeza de Brady y en el mundo interior.

El vínculo del protagonista con un amigo que ha quedado muy debilitado de salud tras una grave caída funciona para acompañar a Brady en la decisión que tomará a medida que se recupera. La ausencia de la madre es pura sutileza; no está ni apenas es nombrada, pero es un silencio incómodo en el hogar.

La película no deja de ser también un espectáculo de luces, con días, atardeceres y noches que acompañan al domador de caballos. ¿Cómo afrontar la vida si uno está obligado por las circunstancias a dejar su sueño? Zhao proyecta la respuesta en una hora y algo más de cuarenta minutos. Ha dejado una joya muy reciente.

FICHA TÉCNICA

Título: The Rider

Año: 2017

Director y guionista: Chloé Zhao

Nota en Filmaffinity: 6,9

Nota en IMDB: 7,4

La puedes ver en Filmin