La tensión crece en el recinto ferial

Los caseteros lamentan la retirada de la pancarta de protesta colocada en el ferial y advierten al Ayuntamiento de que "no quieren guerras", solo que reconozca el "esfuerzo" que realizan para mantener la esencia de San Lucas

La Feria de San Lucas 2018 comienza de manera oficial dentro de unas horas con el pregón de Lola nos quiere y la cabalgata por las calles de la ciudad. Sin embargo, no lo hace de la mejor manera. La pancarta colocada por los caseteros en el recinto ferial para protestar por el trato que reciben del Ayuntamiento de Jaén fue retirada anoche por Bomberos sin que sepan las razones para ello. "Esta asociación solo lucha por unos derechos adquiridos a lo largo de los años en los que, gracias a nuestro esfuerzo, ha habido feria en Jaén. Parecen olvidados los destierros a La Lagunillas, Bulevar, Felipe Arche...", señalan desde el colectivo.

El cartel fue instalado poco antes de que abrieran las casetas aprovechando el día festivo y de hacer públicas sus protestas en el acceso a La Vestida. La Asociación de Caseteros La Fiesta advierte de que "no quiere guerras" y de que solo busca que se reconozca el "esfuerzo" que realizan hosteleros, colectivos y cofradías por mantener la esencia de San Lucas. "Una feria auténtica y propia de la gente de Jaén", insisten desde la asociación.

DE QUÉ SE QUEJAN LOS CASETEROS

La lista de quejas es extensa. Protestan por unas tasas que consideran "abusivas", por la "nula promoción" del ferial Alfonso Sánchez Herrera, por la pérdida sistemática de casetas tradicionales, por el "fomento y promoción" que se hace de la feria de día en el centro y en el Bulevar, por la "falta de transparencia en el procedimiento de adjudicación de licencias e imparcialidad en el proceso", por "el incumplimiento del plazo de entrega y calidades de las carpas, suelos y servicios de las casetas", por "la persecución, presión y amenazas" que sufren, a su juicio, por parte de la Administración local y, por encima de todo, por el modelo de San Lucas por el que, según ellos, está apostando el Ayuntamiento. Todas estas reclamaciones están recogidas en las octavillas que repartirán durante las fiestas. 

Lamentan que, a pesar de que en septiembre expusieron todas las quejas por escrito al Patronato de Cultura, en ningún momento “ha mostrado el más mínimo interés en solucionar los problemas y menos aún en reunirse con ellos”.