Jaén, ciudad del norte

«Di siempre menos de lo necesario», me aconsejan, «haz el favor de prescindir de las explicaciones», me insisten. Di siempre menos y exprésalo con pocas palabras, solo las que necesita la ocasión; y cállate después, cállate por Dios, cállate y no metas la pata; aprende de los estoicos, del Séneca aquel y de Epicteto, su amigo. Autocontrol, necesitas autocontrol y respirar hondo, venga, ya, exprésate. Pues bien, escuchen, solo necesito cinco palabras: no me gusta el fútbol.

No me gusta el fútbol pero tengo dos hermanos árbitros, uno en primera y otro en segunda división. Tengo otro hermano que entrena a los zagalillos de un equipo de Córdoba y una hermana en la sala de máquinas del nuevo Real Jaén C.F. Mi hijo me sienta a ver partidos del Real Madrid y de la selección española y mi suegro me tiene al día del trajín que lleva y que trae el equipo de su vida. ¡Hala, Jaén! ¡Un proyecto, una ilusión! ¡Todos sumamos!

Pero a mí, y disculpen que lo repita otra vez, no me gusta el fútbol. Aun así les recomiendo uno de los mejores libros que he leído sobre fútbol, y solo he leído dos: Dios es redondo, de Juan Villoro, que es uno de los mejores cronistas de fútbol a pie de cancha. Un tipo que me atrapó con la vida secreta de los goles, sí ¡la vida secreta de los goles! Si les gusta el fútbol, se van a divertir con este libro.

Hoy quiero hablar de fútbol. Imaginen que escribo en una pizarra la palabra «JAÉN» y la rodeo con un círculo. Después, y dentro de otro círculo escribo «REAL JAÉN C. F.». Ahora imaginen que los círculos se tocan y se cortan y que, en el espacio que surge de la intersección de ambos, escribo #TodosSumamos, que es la chispa con la que el Real Jaén C. F. ha encendido el entusiasmo de toda la afición y de gran parte de la ciudad. Espectacular, ¿verdad?

Soy consciente de la ilusión que el Real Jaén C. F. está contagiando a la ciudad. En Twitter se constata ese pulso y esa fuerza. Soy mucho de Twitter (allí soy @blumm), y Twitter dice casi siempre la verdad. Es más, si a Twitter le das un pellizco de monja lo suelta todo. Así te cuenta que el @RealJaenCF tiene casi casi ¡60.000 seguidores! Hay aficionados entregados a la causa que han quemado todas las naves por su Real Jaén C. F. Lo puedes leer cada día en Twitter, vibran más que cuando el equipo estaba en divisiones superiores. Se palpa, es algo que me sorprende, y lo digo yo que no me gusta el fútbol. Pero, ¿por qué? ¿Qué está sucediendo? ¿Por qué ahora? ¿Cuáles son los ingredientes de este entusiasmo? ¿Cuál es el secreto? Parte del secreto tiene que ser el compromiso de la directiva, que está volcada en transmitir una actitud, y una actitud muy positiva hacia la afición y hacia la sociedad de Jaén; un quehacer pleno de sinergias y de trabajo en equipo, plantilla, cuerpo técnico y directiva. Sin ambages y sin medias tintas, echando el resto. Y así… así pienso que reflotarán lo que les dé la gana.

Soy consciente de la fuerza que trae este torrente, este nuevo Real Jaén C.F. a su ciudad. Se percibe la fuerza de ese #TodosSumamos que ondean con orgullo y del que yo, que no me gusta el fútbol, me he hecho muy fan.

Estos pensamientos eran los que me rondaban la cabeza cuando me pregunté por qué nuestro gobierno municipal (¡y sus veintisiete concejales!) no se comprometen con los vecinos de esta ciudad, de igual manera a como se han comprometido en el Real Jaén C. F. ¿Y para qué? Para cambiar Jaén de arriba abajo, abandonando la política municipal vieja, antigua y fétida, que no trae ningún beneficio, y apostar por una política municipal nueva, llena de sinergias y guiños entre partidos, ciudadanos y concejales. Luchar por el interés común en la política municipal no es una utopía, ni es buenrollismo e ingenuidad: ¡Ahora necesitamos esa política municipal, amigos! Hoy Jaén necesita un equipo de gobierno capaz de terminar, de una vez por todas, con la situación en la que se encuentra la ciudad. Como reza esa otra masa social, que cada día va a más, Jaén merece más. Ahora necesitamos un gobierno municipal que emule el quehacer y la actitud del equipo de fútbol de nuestra ciudad. Sí, por supuesto. Un gobierno municipal con capacidad de ilusionar a los jiennenses y conseguir una ciudadanía afecta y comprometida con su gobierno municipal y su ciudad bajo el #TodosSumamos.

Entré el otro día a Facebook para decir que Jaén debería parecerse cada día más a una ciudad del norte. Y no es broma. ¿Quién no tiene en su cabeza la imagen de esa ciudad pequeña europea, o incluso española, limpia, acicalada, en armonía con sus habitantes? Ciudades sin apenas o ninguna «deuda», donde los vecinos y el equipo municipal consideran el espacio público una prolongación del patio de su casa, que se desviven por su comercio y sus calles porque, de esta única manera, satisfacen las necesidades de quienes viven en ella; atraen el empleo que genera el más sólido tejido social y comercial, copiando lo que sí funciona de la ciudad vecina y corrigiendo los vicios del ciudadano «díscolo» e incívico. Corporaciones municipales efectivas que luchan por eso, por el civismo y que trabajen para la ciudadanía y para su ciudad sin medias tintas, con soluciones precisas. Hoy es un clamor desesperado del pueblo de Jaén. Queremos una ciudad acorde a nuestros esfuerzos y sumas porque #TodosSumamos. Así habrá de ser la corporación municipal del futuro de una ciudad pequeña como Jaén. Si ellos van a ser capaces de llevar al Real Jaén C. F. donde debe estar, ¿por qué no vamos a ser capaces de llevar, entre todos, a Jaén donde se merece? Copiad, pegad, decid menos de lo necesario, haced: ¡#TodosSumamos!

Blumm escribe todas las semanas en blumm.blog. También puedes leer todos sus artículos en Lacontradejaén.