El obispo valora como "un regalo" su primer encuentro con el Papa

Moseñor Chico regresa de Roma tras una visita 'ad limina' presidida por un ambiente de "fraternidad y cercanía" en torno a la realidad actual de la Iglesia

"Un regalo, un encuentro de tres horas en un ambiente de fraternidad y cercanía, de unos hermanos hablando, en torno a una mesa, con su hermano mayor".

Esa es la sensación que ha dejado en el obispo de Jaén, Sebastián Chico, su primer encuentro con el Papa Francisco, en el marco de la visita 'ad limina' que los prelados de todo el mundo realizan ante el pontífice en Roma. 

Un viaje del que el titular de la diócesis regresa tras participar activamente en diferentes citas de la agenda vaticana, que culminó con la recepción del santo padre al flamante mitrado. Según informan desde el Obispado, monseñor Chico Martínez "contempló a Francisco como un hombre con mucha fuerza interior y una vitalidad y fortaleza extraordinarias" y le trasladó "el cariño y el afecto de los jiennenses".

En la reunión, además de "distintos temas que tienen que ver con la realidad que en estos momentos de la historia vive la Iglesia", se tocaron asuntos como el sínodo universal, el problema migratorio, los jóvenes y, más específicamente, "la piedad popular, que los fieles viven a través de las hermandades y cofradías", concluyen desde la Diócesis.