Contra el fracaso de los mejores alumnos

El IES Jándula y el colectivo Ágora firman un convenio para brindar apoyo educativo a los estudiantes con altas capacidades

¿Pueden los alumnos con altas capacidades fracasar en las aulas? La respuesta es un sí rotundo. En Andújar ya han movido ficha para evitar que ocurra en las etapas posteriores a la Educación Primaria, más vigilada por el protocolo de la Junta de Andalucía. El IES Jándula y la asociación Ágora han firmado un convenio para promover actuaciones que vayan en beneficio tanto de los propios estudiantes, en la ESO y en Bachillerato, como de las familias.

Cuenta Miguel Palomino, director del centro, que el profesorado detectó la necesidad de atender mejor a este tipo de estudiantes. Están convencidos de que la vía más efectiva es un modelo individualizado. En estos momentos, el instituto cuenta con 34 estudiantes valorados como con altas capacidades, si bien la intención del centro es valorar con detalle qué casos de supuestos fracasos escolares son recuperables. "Una de las características de este tipo de alumnos es que afrontan problemas de inserción social y emocional. Ocurre que al tener una evolución más temprana y rápida se alejan del resto y terminan por no relacionarse", razona el docente.

El instituto ha estudiado las estrategias desarrolladas en otros centros de Andalucía, como el IES Llanes en Sevilla o un equipo especializado en Huelva, así como experiencias muy fructíferas en el País Vasco. "La que más nos convence es la del centro sevillano", señala Palomino.

"HAY QUE ACABAR CON LOS MITOS DE LAS ALTAS CAPACIDADES"

El convenio con 'Ágora' hará hincapié en conocer las inquietudes que tienen los padres para potenciar el rendimiento de sus hijos, al tiempo que se les ayuda para que no bajen los brazos en el aula.

Ana Belén Muñoz, psicóloga de 'Ágora' experta en altas capacidades y desarrollo del talento, remarca que hay un cliché que persigue a los estudiantes de este perfil: "Que tengan una gran curiosidad por aprender más de lo que le aportamos desde el instituto y desde las familias no significa que lo sepan todo. Necesitan ayuda emocional, social e intelectual para potenciar el talento", explica en declaraciones a este periódico. "El talento se pierde si no se trabaja. En el 'Jandula' hay una fuerte apuesta en este sentido", añade.

Las actuaciones comenzarán el curso que viene, y una de las posibilidades que estudia 'Ágora' es partir de un cuestionario o entrevista a los padres para recoger sus motivaciones en aras de ayudar al alumnado. Posteriormente, habrá talleres de diferentes temáticas.

El convenio, sellado por Miguel Palomino y Leonor Lázaro, presidenta de 'Ágora', es pionero en Andújar. "Llevamos años de trabajo para incentivar las altas capacidades. Empezamos con el programa Profundiza", recuerda Encarna Perálvarez, que será directora del 'Jándula' a partir del curso que viene. "Es cierto que las administraciones se vuelcan más con los estudiantes que tienen problemas de aprendizaje, pero también es importante atender a los que están en el lado opuesto", señala.

A juicio de los docentes, intervenir también pasa por motivarlos en las áreas instrumentales que más les seduzcan. Que investiguen y sigan trabajando. Son los alumnos que no paran de preguntar, y la inquietud del profesorado es estar a la altura. "Y que nadie se quede fuera", concluye Perálvarez.