El poeta Juan Carlos Abril 'busca una pausa' en México

El escritor villariego está "de gira" en el país azteca para presentar su último libro e impartir un seminario de literatura española

Parafraseando al gran poeta del 27 Gerardo Diego cuando definió al regiomontano universal Alfonso Reyes como "un mexicano cordialmente español", el poeta Juan Carlos Abril (Los Villares, 1974) se confiesa "un español cordialmente mexicano". Tal es su apego al país azteca, donde su obra y su persona cuentan con ojos lectores y brazos fraternos en igual medida. No en vano, Abril ha firmado ediciones sobre autores de México como Antonio Deltoro o Fabio Morábito y su labor crítica siempre está atenta a la producción literaria de la nación hermana, donde el villariego vuelve con frecuencia.

"Aquí en México he publicado muchos libros sobre autores como José Manuel Caballero Bonald, Francisco Brines, Luis García Montero o una antología sobre poesía hispana contemporánea titulada Campos magnéticos. Poetas españoles para el siglo XXI". Si será honda su vinculación que, incluso, su poesía reunida (1907-2007) vio la luz en una editorial mexicana.

En esta ocasión, la "gira" ha llevado al poeta de la Sierra Sur jiennense al país de Octavio Paz con una agenda más que copada: la presentación de su último poemario, En busca de una pausa, la impartición de un seminario de literatura española, su participación como miembro del jurado de un concurso literario...

En cuanto al primer motivo, la puesta de largo del libro de poemas, tuvo lugar en el Café-Bar Las Hormigas de la Casa del Poeta Ramón Velarde, una entidad que es toda una institución nacional: "Vinieron muchos amigos, y poetas muy relevantes, como Coral Bracho o Eduardo Langagne, que son de lo mejor que hay en la lengua española", celebra.

En busca de una pausa, editado por Pre-textos, ofrece una visión personalísima del paso del tiempo, que le ha valido a su autor el aplauso prácticamente unánime de lectores y críticos; uno de estos últimos, el catalán Luis Bagué, escribió en las páginas de Babelia que "el libro se articula alrededor de las idas y venidas de un pensamiento discontinuo que en ocasiones remite a los regateos metapoéticos del medio siglo y en otras a la complicidad ideológica de la otra sentimentalidad, aunque sin la modulación conversacional del cincuenta ni la transitividad comunicativa de la musa experiencial".

Se trata de la sexta publicación en verso del poeta jiennense, tras Un intruso nos somete (Premio Federico García Lorca de la Universidad de Granada 1996), El laberinto azul (accésit del Premio Adonáis 2000), Crisis, de 2007; la citada antología mexicana, y Esperar es un camino. Antología poética (editada en 2016).

Además de la presentación del poemario, Abril imparte un seminario de literatura española en la Fundación para las Letras Mexicanas, evidencia de la estima de la que goza el autor allende los mares, tanto en el mundo académico como en el universo de la creación poética mexicana. Un poeta entre dos orillas cuya obra tiende puentes.