El aceite de oliva encadena su segunda semana con precios a la baja

El paro de transportistas y la búsqueda de grasas sustitutivas al girasol como las de colza, maíz o soja frenan las salidas de aceite de oliva

El mercado del aceite de oliva se caracteriza por ser muy volátil. Factores externos afectan directamente en el precio del producto y este último mes se está comprobando. Desde que comenzó la guerra en Ucrania, su precio fue al alza, empujado por la falta de grasa de girasol. Sin embargo, ahora encadena dos semanas de descenso y estancamiento de las ventas, también provocado por el paro de transportistas. 

Según los últimos datos del sistema Poolred, del 28 de marzo al 3 de abril, el precio en origen del aceite de oliva virgen extra fue de 3.493 euros la tonelada. El virgen se pagó a 3.379 y el lampante de 3.181. En cuanto a las operaciones, se registraron 19, con la salida de 1.353 toneladas.

Con respecto al picual de Jaén, el precio del virgen extra fue de 3.494; el virgen de 3.389 y el lampante de 3.249. En este caso se realizaron 4 operaciones, con la salida de 405 toneladas, de acuerdo con los datos facilitados por la organización agraria Asaja. 

Además de la caída en el precio se produce un estancamiento de las ventas, como consecuencia de que ya no hay tanta demanda de oro líquido por parte de los grandes industriales, como puede ser el sector conservero, para sustituir al de girasol. Se han buscado otras alternativas como el de colza, soja o maíz.

Mientras tanto, el consumo mundial podrá alcanzar las 3.214.500 toneladas en la campaña 2021/2022 que supondrá un aumento del 2,9% respecto a la campaña anterior 2020/21, según datos oficiales y estimaciones de la Secretaría Ejecutiva del Consejo Oleícola Internacional.