Villatorres se prepara para recibir a su restaurado Señor de la Paz

La imagen de Jesús Entrando en Jerusalén volverá mañana domingo al municipio, que la agasajará con una eucaristía, un concierto y una jornada de convivencia

"Cuando venga queremos hacerle algo bonito, un recibimiento en la ermita, si el Covid lo permite, con todo el pueblo presente alrededor de una paella, organizar una rifa...".

Lo decía, el pasado mes de junio, Vicente García, hermano mayor de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Paz en su Entrada Triunfal en Jerusalén y San Antonio Abad de Villatorres, y a fe que la cofradía hará lo posible para cumplir aquel deseo.

No en vano, el colectivo que encauza la devoción de los vecinos hacia este delicado Cristo aún sin siñales de la Pasión y que abre la Semana Santa local le ha preparado una jornada plena de agasajos, acorde con el acontecimiento: su regreso tras someterse a una profunda "y necesaria" (en palabras de García) restauración, a cargo del técnico iliturgitano Antonio Custodio López.

"La imagen, a mi parecer, ha quedado expectacular, digna de una imagen con tanta belleza como la que atesora la Borriquilla", aplaude, satisfecho, el hermano mayor. 

Será mañana domingo en la ermita del Santísimo Cristo de la Salud, patrón del municipio, y 'en presencia' del santo patrón de los animales, a las puertas del pequeño templo, donde el párroco, Germán García Aguilera, oficiará una eucaristía para la que Jesús de la Paz saldrá a cielo abierto y recibirá el amor de los suyos, a partir de las doce y media del mediodía.

Concluida la misa comenzará un buen rato de confraternización que incluirá una barra benéfica y el acompañamiento musical de la Agrupación Maestro Miguel, la banda de cabecera de la procesión del Domingo de Ramos: "Lo que se recaude en la barra irá destinado a sufragar la restauración", aclara Vicente García a este periódico. 

"Pasaremos un buen día de convivencia en la ermita de nuestro patrón, una jornada agradable en torno al Señor", celebra el hermano mayor, que certifica además la expectación levantada en el pueblo ante la llegada de la imagen tras el proceso de restauración: "Estaba muy deteriorada y la gente tiene muchas ganas de recibirlo, está muy entusiasmada", concluye el máximo responsable de la hermandad.

UNA IMAGEN 'ITINERANTE'

Nuestro Padre Jesús de la Paz preside un grupo escultórico de los llamados "de Olot", en boga a mediados del XX, realizada en pasta-cartón a partir de un original del catalán Jaime Martús, que la hermandad recibió en 1991 a impulsos del sacerdote Blas Pegalajar y que, tras salir en procesión durante una década en Jaén con la Cofradía de la Borriquilla, y recibir culto posteriormente en un convento dominico de la capital de la provincia, recibe ahora el amor de los devotos de un municipio que lo ha hecho suyo desde que llegó.

A lo largo del año, el Señor triunfante en su Entrada en Jerusalén puede venerarse en la parroquia de la Asunción de Villatorres.