Cambil no olvida a Diego Morales, desaparecido desde hace un año

El Ayuntamiento organiza una concentración los primeros miércoles de cada mes hasta que aparezca el cambileño, que fue visto por última vez en junio de 2021

"Nos hemos reunido en la puerta del Ayuntamiento de Cambil para recordar que nuestro vecino Diego sigue desaparecido y que no lo olvidamos. Lo haremos todos los primeros miércoles de cada mes hasta que aparezca". Cambil ni quiere ni puede dejar de buscar a Diego Morales, que fue visto por última vez ahora hace justo un año. Por eso, cada mes se llevará a cabo una concentración para que su búsqueda no cese.

Prácticamente ha pasado un año y no hay rastro de Diego Morales González, apodado "el Gato", vecino de Cambil de 46 años que desapareció el 23 de junio del año pasado, aunque no fue denunciado formalmente por la familia hasta el 30 de julio. El trago de la incertidumbre por el que están atravesando recuerdan al que sufrieron y sufren los familiares de María Josefa Padilla, de la que pronto se cumplirán tres años de su desesperación, el 3 de septiembre de 2019.

Tiene 1,60 de estatura, complexión delgada, pelo castaño y ojos marrones y durante un año no se ha sabido nada de él. En cuanto se conoció su desaparición, el propio Ayuntamiento, en colaboración con Protección Civil, cazadores del coto y personas voluntarias se afanaron en "realizar una búsqueda por la zona donde se le vio semanas atrás, con el fin de poder ayudar a la investigación que tiene abierta la Guardia Civil".

A la búsqueda de Morales se unió, posteriormente, el servicio aéreo, unidad canina especialista, seguridad ciudadana y el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM). Además, el 5 de agosto un helicóptero de la Benemérita sobrevoló el municipio y los alrededores. El resultado es el mismo que hoy, no hay noticias de Diego Morales. 

Los esfuerzos no sólo se encaminaron por tierra. En las comunidades digitales se distribuyó una fotografía de Morales, impulsada inicialmente por la Asociación SOS Desaparecidos.

Tiene 1,60 de estatura, complexión delgada, pelo castaño y ojos marrones y durante más de sesenta días no se ha sabido nada de él. En cuanto se conoció su desaparición, el propio Ayuntamiento que preside Camilo Torres, en colaboración con Protección Civil, cazadores del coto y personas voluntarias se afanaron en "realizar una búsqueda por la zona donde se le vio semanas atrás, con el fin de poder ayudar a la investigación que tiene abierta la Guardia Civil".

A la búsqueda de Morales se unió, posteriormente, el servicio aéreo, unidad canina especialista, seguridad ciudadana y el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM). Además, el pasado 5 de agosto un helicóptero de la Benemérita sobrevoló el municipio y los alrededores. El resultado es el mismo que hoy, no hay noticias de Diego Morales. 

Los esfuerzos no sólo se encaminaron por tierra. En las comunidades digitales se distribuyó una fotografía de Morales, impulsada inicialmente por la Asociación SOS Desaparecidos. Ilda María Morales, la hija de Diego, también lideró la acción en las redes.