La carreta del Rocío jiennense hace parada en el Camarín

La artística pieza, recién restaurada, permanecerá en el santuario de Nuestro Padre Jesús Nazareno hasta el próximo 24 de noviembre para ser admirada

El último lugar del que se despiden los rocieros de Jaén, cada año, cuando inician el camino que los lleva a los pies de la Blanca Paloma es el Camarín de Jesús, las orillas del Señor de Jaén.

Allí está, desde el pasado día 9, la carreta recién restaurada de la hermandad jiennense, con su simpecado más antiguo (el del 82, "cargado de peticiones y de promesas"), y esta vez no es para llegar y despedirse, sino para quedarse quince días a los pies del Nazareno en una suerte de acción de gracias de dos semanas largas, que los rocieros de aquí aman a El Abuelo hasta las entrañas.

"Fue un recibimiento muy bonito, se nos pusieron los pelos de punta. Nada más cruzar el umbral del santuario empezó a tocar el tamboril. ¡Qué te voy a decir, Nuestro Padre Jesús y la carreta con el simpecado!", celebra María Dolores Galán, presidenta de la Hermandad del Rocío. 

Sí, las puertas del antiguo templo conventual se abrieron de par en par para los "errantes peregrinos en la tierra" del Santo Reino con su carreta recién restaurada, flamante, hermosísima, como un paso de palio sobre un costal de ruedas en un Encuentro a plena luz de iglesia. 

"Lo que nos quedaba, el último proyecto, era el grabado del techo, y se le han incorporado elementos como la crestería o cuatro angelitos portadores de atributos de la Virgen,  por Orfebrería Villarreal de Sevilla, toda una garantía", manifiesta Galán. ¡Como para no exponerla!

Quienes quieran admirarla, rozarla quizá, rezar ante ella con la mirada cómplice de Jesús a un paso, pueden hacerlo hasta el próximo día 24. Una vez que salga del Camarín, será convenientemente embalada y guardada hasta la hora del camino rociero del año que viene, si es que la pandemia no vuelve a interponerse entre la realidad y el deseo, que diría Cernuda. 

Antes, el 21 de noviembre, a partir de las once y media de la mañana, el santuario acogerá una misa de acción de gracias de la mano de ambas cofradías: Jesús y El Rocío. Una cita especialísima, que como adelanta la presidenta contará con los sones del coro rociero.