La música no suena en el conservatorio

Descubrir una pasión y poder llevarla a cabo es algo hermoso que nos llena de alegría a los seres humanos. Mi hijo descubrió su pasión por la música, en este caso interpretada a través de las teclas de un piano.

Asombra la capacidad de afectación que pueden tener decisiones basadas en distintos criterios sobre las personas más ajenas a ello. En este caso, la decisión de índole política de ofertar la convocatoria de oposiciones para el cuerpo de profesores de conservatorios elementales y profesionales de música y danza en 2017 y no en 2018, como lo hará el resto de comunidades autónomas, coloca a los profesores interinos de los distintos conservatorios de Andalucía en situación de desventaja frente al resto de opositores.

En estas circunstancias se provocará un efecto llamada desde otras comunidades y afectará a la tan maltrecha conciliación familiar. Frente a este agravio, los profesores han defendido sus derechos poniéndose en huelga indefinida desde abril. El no entendimiento entre trabajadores y Administración está derivando en un daño irreparable sobre la formación de los alumnos y alumnas de los centros de enseñanza musical pública, hasta el punto de que podrían perder un curso entero de ilusión y mucho esfuerzo.

Se discuten las cifras de participación, las cifras de afectados, pero mientras tanto las aulas de los niños cerradas y la música no suena en el conservatorio.