La trashumancia, protagonista de los Cursos de Verano de la UNIA

El rector de la UNIA, el gerente de la Fundación Caja Rural de Jaén y la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Baeza inauguran la exposición de fotografía Trashumancia: Ir y venir entre vereas

El rector de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), José Ignacio García, y el gerente de la Fundación Caja Rural de Jaén, Jesús García-Lomas, han sido los encargados de inaugurar la exposición fotográfica Trashumancia-Ir y venir entre vereas, obra de la fotógrafa y veterinaria de la Consejería de Salud, Katy Gómez. El acto ha contado asimismo con la presencia de la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Baeza, Rosa Martínez; el director de la Sede Antonio Machado, Juan Jiménez; el codirector del curso sobre trashumancia que se está celebrando en la Sede baezana, Antonio Contreras de Vera, y la propia autora, que ha ofrecido una visita guiada a través de la exposición.

La exposición, compuesta por más de 40 fotografías, se enmarca en la celebración del curso Trashumancia en el siglo XXI: caminos de cultura biodiversidad, economía rural y ganadería sostenible, que Gómez dirige junto al investigador de la Universidad de Murcia, Antonio Contreras de Vera. Las jornadas lectivas, que se extienden hasta el próximo jueves, reúnen a cerca de una veintena de expertos e investigadores para debatir el futuro de una práctica tan milenaria como esencial para el desarrollo rural.

Durante su intervención, el rector ha expresado su satisfacción por poder compartir esta exposición fotográfica, “una obra espectacular”, con los participantes en los Cursos y con los vecinos de Baeza y ha hecho hincapié en que la autora de las fotografías cuenta en su haber con el Premio Nacional de Fotografía. García ha aprovechado la presencia de directores y alumnado de los Cursos que se están celebrando durante 3 semanas en la Sede de Baeza para calificar de “éxito” esta edición de los Cursos y ha cifrado “en alrededor de 500 alumnos”, los asistentes a los mismos, lo que supone recuperar las cifras habituales previas a la pandemia.  

Por su parte, el gerente de la Fundación ha explicado que la exposición se presenta en dos espacios, la Sala Gaspar Becerra y la Sede Antonio Machado de Baeza; a la par que ha recordado la importancia de la trashumancia para la provincia de Jaén, porque “ayuda al medio ambiente, genera carnes sostenibles y al final, forma parte de nuestra cultura y de nuestra esencia”. Además, ha incidido en la importancia de “ligarla a la parte académica, en este caso, con la Universidad Internacional de Andalucía, desde su Sede Antonio Machado de Baeza”.

Por último, ha tenido palabras para la fotógrafa y su trabajo, del que ha destacado que es el resultado de once años de seguir estas rutas, “caminos de ida y vuelta por la Sierra de Cazorla, la Sierra de Segura y Sierra Morena”, con unas imágenes que “nos acercan a esa vida de estos pastores y de la trashumancia”.

La exposición ofrece una mirada a la práctica milenaria de la trashumancia y el legado que deja en su entorno, a través de perspectivas de protagonistas como Domingo García Rico, pastor trashumante que junto a sus hermanos, Daniel y José Carlos, posee un rebaño de más de 2.000 ovejas segureñas. García Rico protagoniza asimismo el documental que complementa la exposición.

La muestra, situada en el Antiguo Cuartel de Sementales de Baeza (acceso por C/ Compañía, nº 5), permanecerá abierta al visitante hasta el próximo 18 de septiembre, en horario de 18:00 a 21:30 horas, de martes a viernes, y de 10:00 a 13:00 horas, los sábados y domingos. Además, la Sede Antonio Machado de la UNIA expone otras cuatro obras de la muestra en el patio del Antiguo Seminario San Felipe Neri.

Katy Gómez ha agradecido la colaboración prestada por la Fundación Caja Rural, el Ayuntamiento de Baeza y la Internacional de Andalucía. Gómez ha presentado la muestra como “un viaje por las vías pecuarias de la provincia de Jaén, uno de los últimos reductos de España en los que la trashumancia continúa viva“. La artista ha defendido la “capital importancia” de mantener esta práctica desde el punto de vista económico, cultural y medioambiental. Asimismo, ha reivindicado la necesidad de acercarse a esta actividad, “una eterna búsqueda de la primavera que es sinónimo de resiliencia”, y hacerlo de la mano de sus protagonistas, ya que “no se ama lo que no se conoce”.