El juez da la razón al Ayuntamiento en el caso Onda Jaén

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía considera que es "ajustada a derecho" la decisión de extinción colectiva de empleo de los trabajadores de Onda Jaén

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha dictado sentencia en la que considera "ajustada a derecho" la extinción de la radiotelevisión municipal, Onda Jaén, al tiempo que avala el despido colectivo del medio centenar de empleados que conformaban la plantilla. Según indica el PSOE local, el auto "es muy claro" y avala que el despido colectivo se sustentó "en la falta de utilidad pública de dicho servicio, al margen de su deficitario resultado".

Considera que no se ha podido acreditar que hubo "fraude, dolo, coacción o abuso de derecho", explica el PSOE a raíz de conocer la sentencia. También explica que el documento certifica que la corporación demandada respetó la obligación de negociar de buena fe en el periodo de consultas desarrollado a lo largo del expediente. Finalmente, certifica que los afectados por el ERE no habían "accedido al empleo público mediante procedimientos que garanticen los principios constitucionales de igualdad, mérito, capacidad y calificación".

La sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, considera "ajustada a derecho" la extinción de la radiotelevisión municipal. Avala el despido colectivo y, por lo tanto, no da la razón a CC OO, CSIF y a los propios trabajadores, que fueron los que interpusieron la demanda. Contra la sentencia cabe todavía recurso.

Fue el pasado 2 de octubre cuando presentaron la demanda porque ambos sindicatos entendían que el despido colectivo efectuado responde a una decisión "exclusivamente política". A su modo de ver, se habían vulnerado derechos fundamentales de los trabajadores afectados. Con este recurso contra el Ayuntamiento de Jaén se esperaba que el Tribunal Superior de Justicia declarase nula la decisión extintiva y condenase a la “empresa” a readmitir a dichos profesionales a sus legítimos puestos de trabajo.

Año y medio ha pasado desde la madrugada del 6 de agosto de 2019, cuando se incendiaron las instalaciones de Vaciacostales. En un primer momento no se calibró con la repercusión que después tuvo lo allí ocurrido. Ardieron dos habitaciones pero con ellas se llevaron las esperanzas e ilusiones laborales de más de cincuenta personas. Se cerró una televisión y toda la plantilla se quedó sin trabajo tras intentos infructuosos de llegar a un acuerdo. Ahora, han sido los tribunales los que dirimen.